Ahora hablemos de las ultrabooks. Estas son unas laptops ultralivianas (poco mas de 1 kilogramo de peso) y ultradelgadas (poco mas de 20 milímetros de espesor) las cuales fueron desarrolladas por la empresa Intel para competir tanto con la también ultraliviana laptop MacBook Air de Apple, así como con las tablets y los smartphones o teléfonos inteligentes. Si bien Intel registro el nombre ultrabook como una marca propia, también son llamados así dispositivos con características similares que tengan chips fabricados por otras empresas, sin embargo se consideran ultrabooks a aquellos que cumplan con los requisitos establecidos por Intel como procesadores de dicha empresa, tener un grosor no superior a 21 mm para los más grandes y 18 mm para los más pequeños, discos duros de estado sólido (SSD) y carcasas metálicas. Debido a sus dimensiones y a que usan microprocesadores potentes, podemos ver a una ultrabook como una mezcla de tablet y laptop.
Con la introducción de las ultrabooks a partir del año 2011 ¿En que se ven afectados los sistemas operativos Linux, Windows y Mac OS? Bien comencemos primero por el sistema creado por Apple. Esta empresa fue quien en el año 2008 saco al mercado la primera laptop con dimensiones ultralivianas y ultraligeras que fue la MacBook Air cuyo grosor es de 0,3 a 1,7 centímetros y un peso entre 1,08 y 1,35 kilogramos y un microprocesador que puede ser Intel Core i5 con velocidades desde 1,4 a 1,86 GHz o Intel Core 2 Duo con velocidades desde 1,66 a 2,13GHz y un disco duro tipo SSD que va desde 64 hasta 512 Gigabytes y por supuesto con un sistema operativo Mac OS versión Mountain Lion y como este es un sistema bastante cerrado no veremos este sistema instalado en una ultrabooks. A decir verdad es indiferente para Mac OS la aparición de las ultrabooks pues Apple ya tiene su propio dispositivo ultraliviano que de paso es de muy buena calidad.
De acuerdo con lo anterior jamás veremos una ultrabook con Mac OS instalado, por lo menos de fábrica, ya que alguien pudiera hacer el experimento de instalar dicho sistema al dispositivo, aunque no se sabe qué resultados podría tener, tal vez se haya hecho pero no se ha publicado el resultado. Asimismo tampoco veremos una MacBook Air con Linux o Windows instalado, por lo que las ultrabooks, al quedar fuera de este ramo Mac OS por lo dicho en las líneas anteriores, parecen dominio de la gente de Microsoft, como pasa con el resto de los otros tipos de computadoras, como se describió en páginas anteriores, pero quizás Linux (en realidad es GNU/Linux) también puede incursionar también en este ramo tratando de quebrar dicho dominio. Veremos esto con más detalle en los próximos párrafos.
Como Windows es el líder en sistemas operativos y además es creación de la multimillonaria y grande Microsoft, no es de extrañar que las ultrabooks ya vengan instalado de fábrica con su versión más reciente (Windows 10), lo que parece incrementar el dominio de este sistema. Ahora bien, en septiembre de 2012 aparecieron las primeras ultrabooks con Linux instalado, la ZaReason UltraLap 430 y la XPS 13 Developer Edition fabricada por la compañía Dell, las cuales venian específicamente con la distribución Ubuntu versión 12.04;. El sistema operativo libre también se hace presente en estos dispositivos, tratando de romper con la supremacía de Windows, pero surgió un detalle que parece frenar lo anterior y es el precio. Es algo difícil de comprender que un equipo como los nombrados que tenga Windows 10 no tenga mucha diferencia de precio que aquellos que tienen un sistema operativo por el cual no se pagan licencias y además es gratuito.
Lo se puede concluir que las ultrabooks no tendrán mayor impacto sobre los sistemas operativos Windows, Linux y sobretodo Mac OS, ya que aparte de lo explicado anteriormente, hay que ver cuál será el futuro de las ultrabooks; si podrá vencer a su inicial competidor MacBook Air o si podrá demostrar ser mejor que las tablets y los smartphones, ya que su precio no es muy barato que digamos, aunque ha aumentado su cuota de mercado que era del 1.8% en 2011 a un 42.7% en 2015. Si un futuro comprador ve que con una tablet puede hacer lo mismo que con una ultrabook mas cara, no es difícil imaginar por quien se definirá. Y si esto no cambia seguirán el camino de las minilaptops que al principio impactaron pero después pasaron al olvido. Ya Microsoft, previendo lo peor ha incursionado en el campo de las tablets con la esperanza de intentar subsanar las posibles pérdidas que se presenten con la caída de las ultrabooks. Solo será cuestión de tiempo ver que es lo que pasará.
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